El
Barroco es la corriente artística y literaria que se dio a fines del siglo XVII y
comienzos del XVIII , primero en Europa y especialmente en
España, para llegar luego a América, donde logra arraigarse con profundidad,
tal vez porque las condiciones sociales, económicas y culturales eran aptas
para ello. El goce de la vida como constante –una de las características
de este período- puede ser alcanzado sólo por unos pocos
en América. La sociedad se divide según las razas y procedencias:
en primer lugar los españoles que, por lo general, ocupan los cargos públicos o son religiosos que rigen la vida diaria
y espiritual de todos; en segundo lugar
los criollos que aún no han ascendido en la escala social, y por último los mestizos,
indios y negros que llevan sobre sus espaldas la carga de los trabajos más pesados.
La cultura se apoya en
tres pilares fundamentales, caracterizados por su verbalismo y dogmatismo: la Iglesia, la Universidad
y la Corte Virreinal. En literatura se cultiva principalmente la
poesía épica, el teatro, la oratoria sagrada y la novela pastoril. Empiezan
a llegar también a este continente las novelas bizantinas y de aventuras. Pero
es la poesía lírica la que alcanza
mayor representatividad. Esto se debe a que se la recita
en voz alta para entretener a las minorías cultas. En cuanto a la
vida religiosa, el Tribunal de la Santa Inquisición desempeña aquí como en España su poder de censura que tanto influye en
la vida de la sociedad civil y eclesiástica. Recordemos que las Colonias
dependían de España, donde estaba el gobierno central. En el poder se encontraban los Austria menores (Felipe III, Felipe IV y
Carlos II sucesivamente en el siglo
XVII), llamados así por oposición a sus antecesores, los grandes
monarcas de la Casa de Austria, Carlos I y Felipe II. Con la
muerte de este último a fines del siglo XVI queda atrás un siglo glorioso
y comienza a presentirse la decadencia. A pesar de que los ejércitos son
fuertes y poderosos, y el país rico, su debilidad intrínseca va acentuándose
cada vez más. La colonización de América y los conflictos con otros
estados europeos distraen a España de sus propios intereses, ya que descuida sus industrias y dedica sus
mejores hombres al cuidado de las colonias. En el plano literario, por
el contrario, se llega a un período de plenitud, cuyos principales
representantes son: Cervantes, Lope de Vega, Calderón, Quevedo. Después de un período de transición surge un nuevo
movimiento, el Barroco, en contra posición a la estética
renacentista.
El siglo XVII fue por lo general una época
de depresión
económica, consecuencia de la prolongada expansión
del siglo anterior causada principalmente por el descubrimiento de América. Las malas cosechas conllevaron el aumento del precio del trigo y demás productos básicos, con las subsiguientes hambrunas.
El comercio se estancó, especialmente en el área mediterránea, y solo floreció en Inglaterra y Países
Bajos gracias al comercio con Oriente y la creación de grandes compañías comerciales, que
sentaron las bases del capitalismo y el auge de la burguesía. La mala situación económica se agravó con las plagas de peste que asolaron Europa a mediados del siglo XVII, que
afectaron especialmente a la zona mediterránea. Otro factor que generó
miseria y pobreza fueron las guerras, provocadas en su mayoría por el
enfrentamiento entre católicos y protestantes, como es el caso de la Guerra de los Treinta Años (1618-1648). Todos
estos factores provocaron una grave depauperación de la población; en muchos
países, el número de pobres y mendigos llegó a alcanzar la cuarta parte de la
población.
AUTORES DEL BARROCO
EN AMÉRICA
Sor Juana Inés de la cruz
(San Miguel Nepantla, México, 12 de noviembre de 1651 o 1648)
Aprendió todo cuanto era conocido en su época,
leyó a los clásicos griegos y romanos, y la teología del momento. Juana era
tanto el deseo de aprender, que le propuso a su madre disfrazarse de hombre
para asistir a la universidad, según ella misma.
Escribió por encargo de la corte de Madrid tres autos sacramentales que hablan sobre el descubrimiento, la conquista y la evangelización de América.
Escribió por encargo de la corte de Madrid tres autos sacramentales que hablan sobre el descubrimiento, la conquista y la evangelización de América.
Cosas que escribió por gusto propio es un poema filosófico
llamado Primero sueño, llamado así como una manifestación de su admiración a
Luís de Góngora y Argote y sus Soledades.
Ejemplos:
PUES ESTOY CONDENADA
Pues estoy condenada,
Fabio, a la muerte, por decreto tuyo,
y la sentencia airada
ni la apelo, resisto ni la huyo,
óyeme, que no hay reo tan culpado
a quien el confesar le sea negado.
Porque te han informado,
dices, de que mi pecho te ha ofendido,
me has, fiero, condenado.
¿Y pueden, en tu pecho endurecido
más la noticia incierta, que no es ciencia,
que de tantas verdades la experiencia?
Si a otros crédito has dado,
Fabio, ¿por qué a tus ojos se lo niegas,
y el sentido trocado
de la ley, al cordel mi cuello entregas,
pues liberal me amplías los rigores
y avaro me restringes los favores?
Si a otros ojos he visto,
mátenme, Fabio, tus airados ojos;
si a otro cariño asisto,
asístanme implacables tus enojos;
y si otro amor del tuyo me divierte,
tú, que has sido mi vida, me des muerte.
Si a otro, alegre, he mirado,
nunca alegre me mires ni te vea;
si le hablé con agrado,
eterno desagrado en ti posea;
y si otro amor inquieta mi sentido,
sáqueseme el alma tú, que mi alma has sido.
Mas, supuesto que muero,
sin resistir a mí infeliz suerte,
que me des sólo quiero
licencia de que escoja yo mi muerte;
deja la muerte a mi elección medida,
pues en la tuya pongo yo la vida.
La
Sentencia del Justo
Firma Pilatos la que juzga ajena
Sentencia, y es la suya. ¡Oh caso fuerte!
¿Quién creerá que firmando ajena muerte
el mismo juez en ella se condena?
La ambición de sí tanto le enajena
Que con el vil temor ciego no advierte
Que carga sobre sí la infausta suerte,
Quien al Justo sentencia a injusta pena.
Jueces del mundo, detened la mano,
Aún no firméis, mirad si son violencias
Las que os pueden mover de odio inhumano;
Examinad primero las conciencias,
Mirad no haga el Juez recto y soberano
Que en la ajena firméis vuestras sentencias.
Firma Pilatos la que juzga ajena
Sentencia, y es la suya. ¡Oh caso fuerte!
¿Quién creerá que firmando ajena muerte
el mismo juez en ella se condena?
La ambición de sí tanto le enajena
Que con el vil temor ciego no advierte
Que carga sobre sí la infausta suerte,
Quien al Justo sentencia a injusta pena.
Jueces del mundo, detened la mano,
Aún no firméis, mirad si son violencias
Las que os pueden mover de odio inhumano;
Examinad primero las conciencias,
Mirad no haga el Juez recto y soberano
Que en la ajena firméis vuestras sentencias.
Juan Rodríguez Juárez
(1675-1728)
Pintor
representativo del arte barroco en el virreinato de nueva España, autor de
obras temáticas religiosas y de retratos.
Entre sus obras se destacan los retratos del arzobispo José de Lan ciego Fernando de alencastre, duque de linares y los lienzos de la adoración de los reyes de la asunción (1726) su producción manifiesta aún más el paso del tenebrismo del XVII a los estilos del barroco tardío y el rococó. De sus obras más tempranas puede observarse la continuidad de la escuela novohispana iniciada por su abuelo en donde prevalecen la precisión del dibujo, el manejo del claroscuro, la solidez de las figuras y la convincente factura de las telas.
Entre sus obras se destacan los retratos del arzobispo José de Lan ciego Fernando de alencastre, duque de linares y los lienzos de la adoración de los reyes de la asunción (1726) su producción manifiesta aún más el paso del tenebrismo del XVII a los estilos del barroco tardío y el rococó. De sus obras más tempranas puede observarse la continuidad de la escuela novohispana iniciada por su abuelo en donde prevalecen la precisión del dibujo, el manejo del claroscuro, la solidez de las figuras y la convincente factura de las telas.
Ejemplos:
La
coronación de la virgen
En el cuadro que se expone aquí, La coronación de la virgen, se observan primordialmente los tonos azules, en especial el del manto de la virgen, que propicia la centralización como figura principal de la composición. Los tonos rojos y ocres de Cristo y el Padre contrastan con los anteriores concretando un equilibrio cromático y enmarcando la figura de la virgen.
Virgen de Guadalupe
Juan Ruiz de Alarcón
y Mendoza
(Taxco, 1580 o 1581 - Madrid, 4 de agosto de 1639).
Fue un escritor novohispano del Siglo
de Oro que cultivó distintas
variantes de la dramaturgia.
Entre sus obras destacan la comedia La verdad sospechosa, que
constituye una de las obras claves del teatro barroco hispanoamericano,
comparable a las mejores piezas de Lope
de Vega o Tirso de Molina.
Su producción literaria se
adscribe al género de la comedia de caracteres. Forjó un estilo construido a
partir de personajes con identidades muy bien definidas, profundas y difíciles
de entender en una primera lectura. Domina
el juego de palabras y las asociaciones ingeniosas entre estas y las ideas. El
resultado es un lenguaje lleno de refranes y capaz de expresar una gran riqueza
de significados.
El pensamiento de Alarcón
es moralizante, como corresponde al período barroco.
El mundo es un espacio hostil y engañoso, donde prevalecen las apariencias
frente a la virtud y la verdad.
Ataca a las costumbres y vicios sociales de la época, en lo que se distinguió
notablemente del teatro de Lope de Vega, con el que no llegó a simpatizar. Es
el más psicólogo y cortés de los dramaturgos barrocos y sus obras se mueven
siempre en ámbitos urbanos. Su producción, escasa en cantidad si se compara con
la de otros dramaturgos contemporáneos, posee una gran calidad y unidad de
conjunto y fue muy influyente e imitada en el teatro extranjero,
particularmente en el francés.
Ejemplos:
AMOR Y ABORRECIMIENTO
Hermoso dueño mío,
por quien sin fruto lloro,
pues cuanto más te adoro
tanto más desconfío
de vencer la esquiveza
que intenta competir con la belleza!
La natural costumbre
en ti miro trocada:
lo que a todos agrada
te causa pesadumbre;
el ruego te embravece,
amor te hiela, llanto te endurece.
Belleza te compone
divina-no lo ignoro,
pues por deidad te adoro-;
mas ¿qué razón dispone
que perfecciones tales
rompan sus estatutos naturales?
Si a tu belleza he sido
tan tierno enamorado,
si estimo despreciado
y quiero aborrecido,
¿qué ley sufre, o qué fuero,
que me aborrezcas tú porque te quiero?
Hermoso dueño mío,
por quien sin fruto lloro,
pues cuanto más te adoro
tanto más desconfío
de vencer la esquiveza
que intenta competir con la belleza!
La natural costumbre
en ti miro trocada:
lo que a todos agrada
te causa pesadumbre;
el ruego te embravece,
amor te hiela, llanto te endurece.
Belleza te compone
divina-no lo ignoro,
pues por deidad te adoro-;
mas ¿qué razón dispone
que perfecciones tales
rompan sus estatutos naturales?
Si a tu belleza he sido
tan tierno enamorado,
si estimo despreciado
y quiero aborrecido,
¿qué ley sufre, o qué fuero,
que me aborrezcas tú porque te quiero?
Te Nombraré Veces Y Veces
Te nombraré veces y veces.
me acostaré con vos noche y día.
Noches y días con vos.
Me ensuciaré cogiendo con tu sombra.
Te mostraré mi rabioso corazón.
Te pisaré loco de furia.
Te mataré los pedacitos.
Te mataré una con Paco.
Otro lo mato con Rodolfo.
Con Haroldo te mato un pedacito más.
Te mataré con mi hijo en la mano.
Y con el hijo de mi hijo muertito.
Voy a venir con Diana y te mataré.
Voy a venir con José y te mataré.
Te voy a matar derrota.
Nunca me faltará un rostro amado
para matarte otra vez.
Vivo o muerto un rostro amado
hasta que mueras
dolida como estás ya lo sé.
Te voy a matar yo
Te nombraré veces y veces.
me acostaré con vos noche y día.
Noches y días con vos.
Me ensuciaré cogiendo con tu sombra.
Te mostraré mi rabioso corazón.
Te pisaré loco de furia.
Te mataré los pedacitos.
Te mataré una con Paco.
Otro lo mato con Rodolfo.
Con Haroldo te mato un pedacito más.
Te mataré con mi hijo en la mano.
Y con el hijo de mi hijo muertito.
Voy a venir con Diana y te mataré.
Voy a venir con José y te mataré.
Te voy a matar derrota.
Nunca me faltará un rostro amado
para matarte otra vez.
Vivo o muerto un rostro amado
hasta que mueras
dolida como estás ya lo sé.
Te voy a matar yo
te voy a matar.
Severo Sarduy
(Camagüey, Cuba, 25
de febrero de 1937 — París, 8
de junio de 1993),
Fue un narrador, poeta, periodista, crítico
de literatura y arte cubano. Su estilo está emparentado con el de Lezama
Lima y Cabrera Infante, aunque también tiene puntos de contacto
con el grupo Tel Quel de París.
Estudió el bachillerato en la Habana; en 1958. Con el triunfo de la revolución colaboró en Diario
libre y lunes de revolución, viajó a París en 1960 para realizar estudios de Historia del Arte y nunca regresó a su país. Estuvo
vinculado al círculo de pensadores y escritores que hicieron la
revista Tel Quel y trabajó como lector en Editions du Seuil, y
como redactor en la Radiotelevisión francesa. Fue uno de los más grandes escritores
cubanos del siglo XX, cultivó el ensayo y la poesía brillantemente, además fue
un gran narrador perteneciente al neobarroco latinoamericano. Murió en París en
1993. El estilo es muy cuidadoso con el ritmo y
deliberadamente reiterativo, en consonancia con la vida de sus protagonistas,
condenados a vidas monótonas y despersonalizadas.
Ejemplos:
Aunque ungiste el umbral y ensalivaste...
Aunque ungiste el umbral y ensalivaste
no pudo penetrar, lamida y suave,
ni siquiera calar tan vasta nave,
por su volumen como por su lastre.
Burlada mi cautela y en contraste
-linimentos, pudores ni cuidados-
con exiguos anales olvidados
de golpe y sin aviso te adentraste.
Nunca más tolerancia ni acogida
hallará en mí tan solapada inerte
que a placeres antípodas convida
y en rigores simétricos se invierte:
muerte que forma parte de la vida.
Vida que forma parte de la muerte.
Aunque ungiste el umbral y ensalivaste
no pudo penetrar, lamida y suave,
ni siquiera calar tan vasta nave,
por su volumen como por su lastre.
Burlada mi cautela y en contraste
-linimentos, pudores ni cuidados-
con exiguos anales olvidados
de golpe y sin aviso te adentraste.
Nunca más tolerancia ni acogida
hallará en mí tan solapada inerte
que a placeres antípodas convida
y en rigores simétricos se invierte:
muerte que forma parte de la vida.
Vida que forma parte de la muerte.
El émbolo brillante y engrasado...
El émbolo brillante y engrasado
embiste jubiloso la ranura
y derrama su blanca quemadura
más abrasante cuanto más pausado.
Un testigo fugaz y disfrazado
ensaliva y escruta la abertura
que el volumen dilata y que sutura
su propia lava. Y en el ovalado
mercurio tangencial sobre la alfombra
(la torre, embadurnada penetrando,
chorreando de su miel, saliendo, entrando)
descifra el ideograma de la sombra:
el pensamiento es ilusión: templando
viene despacio la que no se nombra.
El émbolo brillante y engrasado
embiste jubiloso la ranura
y derrama su blanca quemadura
más abrasante cuanto más pausado.
Un testigo fugaz y disfrazado
ensaliva y escruta la abertura
que el volumen dilata y que sutura
su propia lava. Y en el ovalado
mercurio tangencial sobre la alfombra
(la torre, embadurnada penetrando,
chorreando de su miel, saliendo, entrando)
descifra el ideograma de la sombra:
el pensamiento es ilusión: templando
viene despacio la que no se nombra.
Gregorio
Vázquez de Arce y Ceballos
Pintor colombiano. Nació el
9 de mayo de 1638, en Bogotá, Colombia. Creció en esta ciudad, el creció en la
sociedad criolla que se estableció en 1630. Descendiente de una familia de
ascendencia andaluza, su familia era inmigrante de Sevilla, España,
estableciéndose en América del Sur en el siglo XVI. De origen andaluz, estudió
pintura en el taller de Baltasar de Figueroa, apreciándose en su obra la
influencia de Murillo y Zurbarán, que recibió a través de los artistas
andaluces. Realizó numerosas series de cuadros de temática religiosa, además de
cultivar el retrato y la pintura alegórica. Vázquez ha sido considerado como el
pintor más grande proveniente de Colombia. La mayoría de sus pinturas son
religiosas en naturaleza, con temas que incluyen la vida de Cristo y de la
virgen, de los santos, y de las escenas del nuevo testamento.
Ejemplos:
La Capilla del Sagrario de la Catedral
de Bogotá es un templo de culto católico, construido para albergar al Santísimo Sacramento. Se localiza en
la ciudad de Bogotá (Colombia), sobre la carrera séptima
frente a la Plaza de Bolívar y pertenece a la jurisdicción
eclesiástica de la arquidiócesis
de Bogotá.
El templo fue construido entre 1660 a 1700, aunque hace parte de la catedral de Bogotá (Primada de
Colombia) es un edificio totalmente independiente, cuenta con planta en cruz latina, de una sola nave longitudinal,
a su vez atravesada por el transepto
nave transversal que forma los brazos de la cruz. La fachada es de estilo
barroco neogranadino y en su interior alberga una importante colección de obras
del pintor Gregorio Vásquez de
Arce y Ceballos, que giran en temas del Antiguo y Nuevo Testamento. En la
temporada de Semana Santa, la
capilla es uno de los templos bogotanos más visitadas por los peregrinos.
Por su significado histórico,
valor arquitectónico y cultural, la capilla, fue declarada Monumento Nacional por medio del decreto 1.584 del 11 de agosto de 1975.
Adoración de los pastores.
Oleo y dibujo preparatorio de Gregorio Vásquez, siglo XVII.
49 x 70 cm. y 41 x 59 cm., respectivamente.
Museo de Arte Colonial, Bogotá.
Virgen
orante.
Oleo
sobre madera y dibujo preparatorio de Gregorio Vásquez.
49 x 34 cm. y 29 x 28
cm., respectivamente.
Museo
de Arte Colonial, Bogotá.
Karla
Guadalupe Arana Guillén.
2° Año de Bachillerato
“B”